Buenas, Feliz inicio de semana
Ahora que va a comenzar el otoño, no podemos perder uno de los hábitos más saludables del verano: el consumo de frutas y verduras frescas.
Además de sacar todo el sabor natural de los alimentos, también es la mejor manera que tenemos de consumir todos los nutrientes esenciales que nos aportan, ya que no pierde ninguno de ellos durante el proceso de cocinado.
Por ejemplo:
- Tomate.
Es una rica fuente de licopeno, que le da su color rojo y su elevado poder antioxidante, que nos protege frente a numerosas enfermedades, incluido el cáncer y las enfermedades cardiovasculares y también es puedo para evitar problemas de visión.
- La sandia.
Es rica en licopeno, vitaminas B y C, ácido fólico, caroteno, potasio y fibra, además de tener propiedades antioxidantes y depurativas y ser diurética e hidratante, por lo que nos ayuda a limpiar nuestro sistema digestivo al tiempo que favorece la eliminación de toxinas, fortalece el sistema inmunológico y evita el dolor muscular.
- El melón.
Aporta vitamina A, que es muy hidratante para la piel y las mucosas, vitamina E, un potente antioxidante; tiene efecto diurético y laxante (suave), pues elimina toxinas y ayuda a neutralizar la acidez; y además, aporta fibra, potasio, calcio, ácido fólico y zinc, con lo que ayuda a prevenir la gota, la artritis y regula los niveles altos de colesterol.
Por ello, intenta consumir cada día frutas y verduras, ya que nos aportan todos los nutrientes necesarios para realizar nuestras funciones vitales y para tener una buena calidad de salud.
